Las veo alli, gigantescas y erguidas sobre toda esta arena. No son mas chicas que el obelisco, me parece. Son monstruosamente altas. Deben llegar a la docena. Una junto a la otra en rigurosa y erecta fila. Publicidad de viagra natural. Envidia de cualquier blandito impotente. Averguenzan a cualquier pito con su postura. Derechas hacia el cielo, hacia los angeles, hacia dios.
No se por qué mi cabeza funciona siempre al reves; las miro y pienso, y sueño que estaria bueno estar alli, en el campo y no en Buenos Aires y una o dos veces por mes irme un par de dias hacia la ciudad y disfrutar de trabajar en el campo junto a los animalitos y los yuyitos y las palmeritas y mirar la tele por el cable y navegar por internet y sentirme tranquilo y mosca. Y vuelvo a soñar y disfruto con la idea y lo vuelvo a pensar y lo fantaseo como posibilidad real y ellas me observan desde su altura de potencias "Palmera Potencia" y siento que se rien de mi con mis boludeces y mis miedos y mis inseguridades de puto sudaca lloron en el cuarto mundo no tan lejano del primero pero tan lejos del interno.
Estoy sentado aca junto a las palmeras, en la granja junto al burro y las ovejitas y las gallinitas y son las 10 de la mañana y debe haber ya unos 30 grados de caluroso calor y el cielo es mas que perfecto de celeste y los angeles llenan bolsitas con tierra y arenita del desierto para plantar no se que mierda de semillitas despues y yo sentadito como una vaca escuchandolos trabajar y saltar de nube en nube mientras las negras bolsitas se van llenando de trabajo sano y fecundo que quizas no sirva para una mierda despues, pero que ellos hacen con tanto amor y dedicacion solamente por el placer de trabajar y dar algo de lo que tienen dentro. Y yo pensando en que bueno estaria mirar palmeritas por alla...
Y que si las tengo acבa las quisiera alla. Y que si las tuve alli las queria por aca.Y que nunca hay poronga que calce bien en mi ajustada y dilatada humanidad.
Estaba el Palmar de Colon pero parece que las porongasas de aca se me hacian mejores.
Fabian Bachrach
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